15 julio 2009
Gritando
Grita su voz y la mía
grita la tierra de nadie
gritan las almas desvalidas
esas lenguas viperinas que manchan escupiendo
lloran los desolados porque no tienen consuelo
piden victoria sin saber lo que quieren
sueñan con un mundo mejor
no hayan la paz; pues no hay paz en este mundo
fingen todos que se quieren y sus lenguas cuan puñales
atraviesan corazones de inocentes mortales
ya caen; es el un sueño eterno.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Hermoso alegato. Buen arma, la poesia, para denunciar la injusticia.
ResponderEliminarUn saludo
si, Cani estoy desacuerdo,una buena arma es la poesía!
ResponderEliminarun beso