28 julio 2009

NADIE SE VA SIN ANTES DESPEDIRSE


Después de un largo día todos quieren descansar, y esto es más o menos así. Este fue quizás el más largo de los días, o tal vez sin darnos cuenta fueron años. Supongo que ya estábamos un poco hastiados el uno del otro, y hasta de nosotros mismos...
Superficialmente hablando, ninguno de los dos tiene demasiado la culpa, pero ¿no es acaso culpa nuestra haber llegado hasta este punto?, ¿no somos culpables de los delitos de abandono, de desinterés, de tolerancia extrema, de disculpas gratuitas, de autoconmiseración? Y ahora mirá lo que nos pasa...
No me queda más opción que sostener lo que siempre pensé: todo acontecimiento es producto del karma, el causa y efecto, "todo vuelve" y demás...Estamos recibiendo lo que nos dimos durante años. Las dosis de indiferencia, ironía, cinismo, rencor, lástima, cólera, histeria y recriminaciones se nos devuelven multiplicadas por cien; por mil tal vez...¿Cómo no pudimos evitarlo? O peor aún, ¿cómo pudiéndolo evitar no lo hicimos?...Qué ineptos somos para el amor!
Pero para plantearse todo esto es tarde. Tarde, naturalmente...No recuerdo una sola vez en mi vida en la que haya llegado a tiempo para salvar ni un alma. Y entonces...Entonces nada. Eso, nada. Sensación de vacío absoluto; creo que ya la conocía...
Y ahora la despedida, porque nadie se va sin antes despedirse: Hasta nunca, o hasta siempre, hasta algún día, o hasta mañana -si Dios quiere-...

3 comentarios:

  1. llegara un momento en el que no te será necesario llegar a tiempo, porque ya estarás ahi, volviendo siempre. genial. saludos

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  2. En mi blog, nunca llegaras tarde :)

    Ahora en serio, hoy, es la segunda lagrima k dejo escapar, tras leer un texto antes, y ahora el tuyo. COn el cual, me he sentido totalmente identificado, y escarmentado por haber sufrido algo similar (o incluso igual).

    Un enorme abrazoZ.

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  3. Leyendo tu texto macarena...recordé el cuento "el otro" de Borges...siento...que estás sintiendo o viviendo cosas que estoy transitando, me identifica, y a pesar de nuestra diferencia de edad...sos tan adulta en tus reflexiones, como si hubieras vivido mil años. Un abrazo me atravesó este texto.

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