02 noviembre 2009

"Ecografía de una flor negra, variante 01", Mar Cantón.

Te leo y contemplo una pintura de Giger desde el arco hasta la punta, te veo reptar las aristas que tus palabras forman en frases complejas que decaen o ascienden haciendo sangre. La miseria amamanta a la lujuria con su sexo raído mientras se tocan las liras e insinúan los cantos que nunca sonaron fuera de la cabeza, ni más allá del sueño o la mentira. El miedo se esconde de sí mismo en tu paisaje.


La criatura muere antes de ser concebida. Un duelo de muerte en vida por beber su sangre blanca, inmaculada. Se seca cuando llega a la boca, no mata la sed. Eterna. Imaginan fluidos para seguir viviendo, se deslizan por ellos, lo bailan y dibujan su ausencia con sus atrofiados cuerpos... Y es entonces cuando puedo ver el río cobrando almas, sus olas suavizando los picos puñaladas, las arcadas de agua y su violencia.


Abrid la boca. Ahora. Ahora sí, que arrastre vísceras y lave almas, abrid la puerta a la nueva sangre, dejad que os fluya y redima de nuevo, pronto la sal a las heridas y tras el dolor la cura, la sanidad... Pronto el mar, como siempre y para siempre, pronto el mar y sus olas, ordenando, lamiendo, partiendo, lastimando, colocando, arañando, sujetando, acunando...


Sólo falta la tormenta, las nubes empapadas, gordas, grises, decadentes, llorándonos encima en este insoportable estío que no termina de morir ni de matarnos. Los cuerpos están tendidos y rendidos, listos para el bautismo que selle el pacto con la no muerte y nos permita estar de nuevo unos centímetros más cerca del horizonte a nuestros ojos... Para caer abatidos otra vez a los nueve meses.


Dos de noviembre, minutos antes del medio día, 27º y su guadaña.


Mar Cantón, 2009, tras la lectura de >>>

"Trajes de silecio y desperdicio vocal", Alberto Trinidad.





Gracias a Alberto García Salido, "No pasa nada de nuevo..." Por mostrarme su magnífica obra (de su página el tema "Syriana", de Alexandre Desplat que incluyo).

Entró viento de norte, al fin...

Ariam Ram - Diario de Días raros


2 comentarios:

  1. Muy grato su ensayo de días extraños.

    Aullidos y saludos

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  2. Gracias Gran Lobo... Y encantada... Mucho hacía que no publicaba en la Gaceta, había ganas, sí, muchas...

    Saludos!

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