16 octubre 2009
Undécimo desvarío terrestre.
Recorro la senda que asciende con el uno repetido desde el Mar azul. El ruido del motor se mezcla con el viento y se aleja de mí mientras avanzo en lomos de metal. Siento unas manos que se abrazan al torso protegido por el cuero negro y sonrío detrás de la máscara. Costa del este, Mar de ajo y son tus senos los que se dibujan en mi espalda. Sigo las rectas líneas de la serpiente de asfalto que repta paralela al azul de la costa y que termina en esa lanza adornada por ríos como una pequeña Venecia natural con nombre de santo.
El viento modela el paisaje que rodea el faro de rayas azules y blancas: mástil del barco de la tierra que se eleva esperando que alguien despliegue sus velas para llevarlo a la mar. En su cima, la luz de la noche gobierna la vegetación que lo abraza y desde lejos los barcos hacen guiños con sus luces rojas y verdes al pasar.
El sol camino del occidente se enreda detrás de las montañas cuando mar y cielo se confunden envueltos de cobalto surcado por oscuras gaviotas blancas. Detengo las ruedas que me llevan solitario y escucho lo que dice el viento enmascarado de invisible. Su voz Habla de mar y silencio con olas que cabalgan adentrándose en los ríos mientras miro al norte del oeste donde tus ojos se alzan sobre todo el paisaje. Cuando vuelva a la senda tornada en sombras que la luz de mi proa desgarra al pasar, volverás a abrazarme mientras recorro las tierras en la motocicleta de sueños que lleva tu nombre, libertad.
Por el lobo que camina.
**Imagen es luparia
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Gran lobo Gris,
Undécimo desvario
Un ser sensible, multidisciplinar y autodidacta en la mayoría de los casos. Amante de la Mitología, de los libros, de Tolkien, de la mar, los animales, la educación y el respeto a la madre naturaleza.
Un buscador incansable, un Ulises como Tennyson dibujo, un marinero que en su goleta recorre los mares de la vida. Poeta y escritor aficionado, amante de la música en directo, de las conversaciones inteligentes, el humor y el té con una nube de leche.
Desertor de la guerra, de la mentira, de la hipocresía, de los realitis mediáticos, de la globalización de ideas, de los fanatismos tanto religiosos como políticos, de los uniformes ciudadanos, de la ecología de pasarela, de la moda, de las barbies, del arte llamado moderno( no en todos los casos) de las masas manipulables.
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Tu caminar por el mar y los paisajes, pintandolos con tu poesia, toman un nuevo matiz y pasan a ser parte de tu sentir y emociones.
ResponderEliminarBravo por tu caminar en la naturaleza y por compartir esos aullidos de belleza!
Abrazos!
Que tengas un buen viaje por el azul... porque en mar o en tierra solo buscas la libertasd
ResponderEliminarQue manera tan preciosa de buscar LIBERTAD!
ResponderEliminarDescribes las emociones de un modo tan sublime que cerrando los ojos puedo imaginar cada sensación, e incluso sentir la suave brisa sobre la piel. Sencillamente hermoso.
ResponderEliminarUn beso!
Que momentos magicos!
ResponderEliminarQuisiera disfrutar más de toda la naturazela...
Muy precioso tu escrito amigo!
Un abrazo
bonito viaje por el mar....bellisimos sentimientos
ResponderEliminarbesos
oh amables, Gracias a todos.
ResponderEliminar-Anny, el caminar ésta vez fue oniríco totalmente. aún el lobo no recorrió esa senda.Gracias, por emocionarte y ver la belleza en éstas letras. Aullidos afectivos, cielo.
-Kramen, gracias.
Cuando salgas en el viaje, hacia Ítaca
desea que el camino sea largo,(C.K.)
-Mariangeles, quizá veas belleza por albergarla en tu interior. Gracias...
Aullidos adfectivos.
-Marijose, imaginarte imaginanado mi pequeño desvarío, es el mejor regalo, gracias siempre a ti. Que vuele un beso de regreso para quien amable lo envió.8-)
-Viviane, la naturaleza te espera, solo has de dejar que fluya por tus venas anegando todo a su paso.
Aullidos afectivos y abrazos.
-Vangelisa, sin perder el mar de vista es la costa la protagonista. Gracias bella por sentir el desvarío.
Aullidos afectivos